MATERIALES:
Laboratorio: - Vaso de precipitado - Bisturí - Vidrio de reloj - Pinzas de madera - Mechero - Pinza de metal - Portas - Cubres -
Biológicos: - Agua - Raicillas cebolla -
Reactivos: - Orceína A y B -
METODOLOGÍA:
- Para realizar este experimento habría sido mejor utilizar las raíces de una cebolla recién cogida del huerto, pero nosotros cogumos una cebolla y la tuvimos cuatro días con las raíces en remojo.
- Las mantuvimos en remojo para que crecieran para que continuaran su división mitótica y así poder ver las diferentes fases de los cromosomas.
- Con un bisturí cortamos los últimos 5mm de tres raicillas y las colocamos en un vidrio de reloj.
- Vertimos en el vidrio de reloj la suficiente cantidad de orceína A como para que cubra toda las raicillas.
- Dejamos que actúe durante 10 min para que las células se tiñan bien.
- Sujetamos con unas pinzas de madera el vidrio de reloj y lo calentamos poco a poco sin que las raíces se quemen, hasta que veamos que desprenda un vapor.
- Con una pinza de metal cogemos cada raicilla y las metemos en agua para quitar el exceso de orceína.
- Colocamos las raíces sin exceso en un porta y añadimos una gota de orceína B.
- Dejamos que actúe durante dos minutos y retiramos el exceso de orceína B con un papel secante.
- Colocamos el cubre sobre la raíz y apretamos para aplastar la raíz.
- Tratamos de observar las fases de los cromosomas mediante el microscopio.
RESULTADOS:
Ningún grupo consiguió ver todas las fases de los cromosomas, abundaban las profases pero no se llegaba a ver más, distinguíamos perfectamente cada celda de célula con su núcleo, pero no aparecían los hilitos que indicaban mitosis. Debió ser por la cebolla utilizada o por algún error nuestro.
Fue una práctica muy interesante de hacer a pesar de que no consiguiéramos los resultados esperados después de dos intentos para poder ver como se dividían las células para seguir creciendo la raíz.

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